El próximo martes, 16 de mayo de 2006, tendrá lugar de 8,30 a 10,30 horas en la Université Catholique de Louvain (Belgica)* la presentación nº 72 de HaD con un seminario de Carlos Barros sobre «Lo latino en la historiografía global».

Lugar:

Centre d’Études Hispaniques
Faculté de Philosophie et Lettres
C211, Edificio Erasmus,
Place Blas Pascal
Louvain-La-Neuve

Coordina: Claudio Canaparo

* El 30-31 de marzo de 2002 tuvo lugar, organizado por el Départament d’histoire de l’Université Catholique Louvain-la-Neuve, otros dos seminarios de historiografía del coordinador de HaD sobre «Interdisciplinarité, Histoire, Historiographie» y «L’écriture de l’histoire est elle finie?»

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Carlos Barros
«Lo latino en la historiografía global»

LO LATINO EN LA HISTORIOGRAFÍA GLOBAL

 

Trascripción literal de la intervención de Carlos Barros, coordinador de HaD, el 16 de mayo de 2006 en el Centro de Estudios Hispánicos de la Université Catholique de Louvain, Bélgica.

 

Esto en realidad fue una conferencia inaugural de un postgrado de estudios latinoamericanos de la UNAM, Universidad Autónoma de México en el 2003 que ahora aquí, de otra forma, vamos a exponer, y vamos a grabar además, y lo vamos a difundir y a transcribir a través de nuestra red en Internet. Empezando por hablar mínimamente de la globalización, casi más bien hablar de los efectos de la globalización, es decir, la globalización trastoca de una manera u otra las relaciones internacionales, pero es que trastoca de una manera radical las relaciones académicas internacionales y el objeto de la conferencia es un efecto positivo de cómo se puede aprovechar la globalización en las relaciones internacionales, la globalización académica, en un sentido progresivo, es el caso de Historia a Debate vinculado a un área de conocimiento, a una disciplina que es la historia, no porque no nos inquiete la literatura, la filosofía, la sociología, la antropología, pero yo le explicaba a vuestro profesor Claudio Canaparo que ya nos es sumamente difícil abarcar la disciplina de la historia en todo el mundo, casi nada, y no sólo en el mundo latino, por lo tanto nos mantenemos ahí y en nuestra experiencia de red académica de iniciativa latina, la estamos empezando a divulgar fuera de nuestro medio académico, nuestro medio profesional que son los historiadores; esto hace también de presentación número 72 de Historia a Debate, hemos empezado ya hace muchos años con esto y normalmente aprovechamos las visitas académicas para explicar lo que es nuestra red temática e invitar a participar en ella a los jóvenes colegas, digo jóvenes colegas porque normalmente los profesores tienen más acceso a nuestra red de intercambio porque las direcciones electrónicas de los profesores suelen estar en las páginas Web de las universidades, pero no así la de los alumnos, raramente la de los alumnos, y por eso aprovechamos las visitas, y en este caso que soy el coordinador de la red, pero en otros casos son otros historiadores, miembros de la red, que aprovechan sus visitas académicas para dar a conocer la red  e invitaros a participar en ella.

Claudio hablaba de diez años, claro, en el año 2003 celebramos el décimo aniversario, la primera actividad de Historia a Debate fue en el año 1993, el I Congreso Internacional de Historia a Debate en Santiago de Compostela, universidad a la que yo pertenezco y donde está el centro de coordinación de esta red internacional. Cuando esta exposición, que nunca la hemos llegado a publicar, la hice en México DF, era el décimo aniversario de Historia a Debate.

En general como nos interesa más referirnos, no al inicio en 1993, sino al año 1999 -que  fue cuando celebramos en II Congreso Internacional de Historia a Debate, el último lo acabamos de celebrar en el año 2004, el tercero, y en el cual se incorporó y empezó a colaborar con nosotros vuestro profesor Claudio Canaparo- y en 1999 es cuando aterrizamos en Internet, entonces realmente es el segundo comienzo de la red, y a partir de ese momento se trata de una evolución acelerada, sorprendente para nosotros mismos, yo tengo aquí en el esquema que en el año 2003 habíamos tenido medio millón de visitas a nuestra  página Web, pero es que hoy estamos ya cerca de los tres millones de visitas y tened en cuenta que se trata de visitas de historiadores, por lo tanto de una parte de las humanidades, de las ciencias sociales, y dentro de esos historiadores no le interesa igual a todo el mundo nuestra red porque los temas a los que nos dedicamos son de metodología, de historiografía, de teoría de la historia que hemos ampliado después a didáctica de la historia y a la relación de la historia con la sociedad de nuestro tiempo, por lo tanto nosotros pensamos que estos cerca ya de tres millones de visitas no son tres millones de historiadores, que no los hay en el mundo -le iría mejor [al mundo] no lo sé, supongo- sino cerca de quince mil, veinte mil historiadores que de una manera regular, casi diaria en muchos casos, visitan nuestra página Web para seguir los debates y otras informaciones de nuestras actividades que allí facilitamos. Tenemos unas listas de correo electrónico, una lista general sobre esta temática a la que me refería antes y una que llamamos de historia inmediata que son debates de historiadores sobre cuestiones de actualidad que tengan una relevancia histórica, sumando las dos listas más las personas que todos los días conectan con la página Web -hace tres años calculábamos que conectan con nosotros cada día tres mil trescientos, aproximadamente, historiadores- y yo creo que ahora estamos entre siete y ocho mil colegas de trescientas cincuenta universidades de cincuenta países, esto último no ha variado, más o menos entre trescientas, cuatrocientas universidades se conectan con nosotros a través de Internet diariamente de unos cincuenta países yo creo que de todos los continentes. Por lo tanto las actividades nuestras empezaron de una manera presencial, es decir, físicamente, congresos, intercambios, etc… que continuamos haciendo cada equis años, pero las actividades digitales se han comido todo el resto, es decir, son hoy la actividad principal diaria, lo cual nos hace vivir la profesión de un manera distinta. Claro, no todo el mundo que visita nuestras listas o visita la Web lo vive con igual intensidad, pero nosotros tenemos por hábito que cuando un colega se conecta a nuestra red y pasados dos o tres meses sigue conectado ahí, porque te puedes borrar en cualquier momento, es voluntario, quiere decir que en alguna idea sobre como ejercer nuestro oficio coincide con nosotros, por lo tanto, de esa manera nosotros ya hace unos años que consideramos que lo que hemos creado es un movimiento historiográfico, a pesar de que los elementos comunes que nos unen en general pueden parecer muy tenues, muy light, pero en el mundo académico que hoy vivimos, donde todo está tan fragmentado y donde cada uno y cada una, de los profesores me estoy refiriendo, nos preocupamos de lo nuestro, esta necesidad de una relación social académica para vivir la profesión en contacto con otros, de otros países, de otras áreas, y diariamente, y manteniendo este contacto a lo largo de los años, eso quiere decir, aunque ese colega no lo sepa, que estamos creando un consenso historiográfico, que estamos creando un nuevo espacio académico, lo que en términos del siglo pasado, del siglo XX, es una tendencia historiográfica, un movimiento historiográfico, claro, algunos hablan prosa sin saberlo, como el personaje de Moliere, pero eso nos da igual porque no deja de ser cierto lo que afirma, es decir que hemos logrado poner en contacto a gente muy diversa y tenemos entre nosotros un espíritu común, por ejemplo, abierto al debate, abierto a la interdisciplinaridad, al compromiso con la sociedad, a la necesidad de renovar la disciplina, de vivir la universidad como profesores de manera que no sea un mero puesto académico, un mero puesto de trabajo donde tienes una serie de responsabilidades, y eso causa una gran satisfacción y viene a cubrir un enorme vacío que existía como consecuencia de la fragmentación que han vivido la universidad y nuestras disciplinas en los últimos años. Por lo tanto lo nuestro es debate, reflexión sobre el oficio de historiador, sobre la escritura de la historia y unos sabiéndolo y otros sin saberlo estamos construyendo lo que llamamos un nuevo paradigma, un nuevo consenso, paradigma en el sentido de un consenso de la comunidad de especialistas, es el sentido de Thomas S. Kuhn. Yo pienso que sí, que como decía Claudio Canaparo se trata de un fenómeno único, para desgracia nuestra porque nos convendría, lo hablábamos antes, que hubiera movimientos parecidos en el ámbito francófono y en el ámbito anglófono, principalmente con los cuales poder establecer alianzas para cambiar la escritura de la historia globalmente, no sólo en nuestras áreas culturales de dimensión global, pero eso no es así, lo cual tampoco nos preocupa demasiado, somos vanguardia en esto, tampoco hay muchos precedentes en el ámbito latino, somos vanguardia en un ámbito universitario, un ámbito académico y tampoco nos preocupa ni nos frustra demasiado, pero querríamos animar a otros para que fueran en la misma dirección.

El título de esta exposición: Lo latino en la historiografía global, en realidad fue un debate en Internet, porque continuamente estamos haciendo debates sobre temas de método, teoría, relación con la sociedad,… y que surgió después del segundo congreso de 1999, porque el primero de 1993 había sido un congreso eurocéntrico, más bien participaciones europeas con algunos colegas norteamericanos y poco más, pero en el segundo congreso hubo una representación latinoamericana cuyas intervenciones causaron cierto impacto como se demuestra en las reseñas del segundo congreso que están en nuestra página Web, y cierto desconcierto entre los propios intervinientes de  países latinoamericanos, porque están muy acostumbrados a venir a congresos a Europa y a Estados Unidos, sobre todo a Europa, y sentirse en un segundo plano al no tener un papel protagonista sino de venir a aquí a aprender, pero no a enseñar, se suponía, y en el segundo congreso le hemos dado un papel igual de protagonista que a otros colegas porque no hacemos distinción jerárquica, últimamente ni siquiera entre ponencias y comunicaciones, salvo que por razones de homenaje, personas mayores ya que han jugado un papel importante en nuestra disciplina tenemos unas conferencias generales, plenarias, pero que probablemente eso desaparezca porque esas personas que han significado mucho en la historiografía del siglo XX han terminado ya con el siglo XX: en el último congreso que fue en el 2004 el hijo de Marc Bloch, historiador que ya tiene unos ochenta y tantos años, también intervino André Under__   un historiador alemán con una trayectoria en América latina y también en Estados Unidos, enfermo de cáncer y que murió poco después, y Siro Franc Marion Cardoso, un colega también con problemas de cáncer, se puede decir n, no es un secreto, y no es tan mayor; pero procuramos que en ese sentido no sea un congreso demasiado jerárquico y que el que tenga algo que decir que lo diga independientemente de su status académico, incluso estudiantes de tercer ciclo, de doctorado tienen ahí su lugar y el mismo tiempo que el resto de los ponentes, y así hemos hecho naturalmente con los colegas latinoamericanos y ellos mismos se encontraban un poco desconcertados por la atención que se les prestaba y la libertad que tenían para intervenir allí, y también eso produjo cierto rechazo que venían de Europa, también algún español, que tampoco estaban muy acostumbrados a oír las cosas que tuvieron que oír allí. Ciertamente en esa ocasión los historiadores que vinieron, particularmente de Argentina, hicieron unas intervenciones especialmente comprometidas, ya veremos, pero yo creo que a eso hay que acostumbrarse y eso es el futuro, es el compromiso de la historia y en general de la universidad con la sociedad, el cambio que estamos viviendo, entonces algunos lo interpretaron como una reminiscencia del pasado, y nosotros sospechábamos que del futuro que viene, y en ese sentido el futuro pasa por América Latina y en otros aspectos. Fue un poco incómodo para nosotros, para mi en particular como coordinador del congreso porque tuve que escuchar las opiniones por los pasillos de los colegas que venían a mi y se quejaban de que la historiografía latinoamericana no tenía nada nuevo que ofrecer como si pudiéramos presumir ahora en Europa, sobre todo, de tener algo nuevo que ofrecer en nuestra disciplina, la historiografía europea fue el foco de la renovación historiográfica desde finales del siglo XIX y hasta finales del siglo XX, pero ya no se puede decir hoy eso así, y los colegas que seguimos este tema lo sabemos perfectamente, por lo tanto no presumamos y aceptemos que en el mundo de la globalización la renovación puede venir de cualquier lugar, ya no como decía antes de la periferia, que es peor para los eurocéntricos, es que cualquier periferia pasada puede ser hoy centro en cualquier parte del mundo y en cualquiera de los continentes, desgraciadamente excluyendo África de momento. Nos hizo reflexionar, por lo tanto, esto que pasó en el congreso y aunque algunas reseñas lo citan, forma parte más de lo que se comenta en los pasillos, de lo que se le comenta al coordinador que suele ser mucho más sincero que lo que a veces se pone en una reseña de un acto académico, nos hizo reflexionar que eso es consecuencia de esa visión que hay hacia América Latina como una sociedad dependiente, y que además hay mucha gente en América Latina que también cree ellos son dependientes y tratan de salvarse ellos individualmente pensando que esas sociedades “atrasadas” no tienen remedio, ya veremos como eso está empezando a cambiar, y además es inútil, es miopía no verlo; por una vez voy a poner un ejemplo extraacadémico, es el caso de Bolivia: nosotros como hacemos historiografía inmediata, es decir, nuestros debates historiográficos están muy vinculados a lo que estamos viviendo, porque claro, la manera de escribir la historia guarda relación con la manera de vivir la historia, por lo tanto los acontecimientos tienen mucha incidencia en nuestros debates historiográficos, se quiera o no se quiera ver, y una de las cosas que seguimos con más atención, por lo menos yo, es la evolución de los movimientos sociales, era impensable que lo que el uno de enero de 1994 fue la insurrección de los indígenas de la selva La Candona? en el estado de Chiapas, doce años después se transformara en el triunfo de Evo Morales en las elecciones de Bolivia, que tiene una trascendencia histórica, no solamente para América Latina, enorme, y ya lo están diciendo todos los días y hay algunos que todavía no se han dado cuenta, que ahora vivimos en un mundo donde en un país donde hay una mayoría indígena se organiza socialmente y gana por mayoría absoluta unas elecciones, y además tiene un proyecto de no vivir de una manera dependiente de los países más poderosos -en este caso, por cercanía, de los Estados Unidos- para recuperar sus recursos naturales para poder establecer programas sociales y sacar de la pobreza a la mayoría de la población. Por eso os digo que eso fue anunciado ya en el congreso de 1999 y que el compromiso de los historiadores con los cambios sociales no es una cosa del pasado, sino que es una cosa del futuro que viene, y lo insoportable que se le hace a las mayorías sociales que viven fuera de Europa vivir en la miseria en un mundo donde la técnica permitiría que todo el mundo pudiera comer, eso se hace absolutamente insoportable y afortunadamente la globalización del sistema democrático permite que se llegue al gobierno y que no puedan dar, como en el caso de Salvador Allende, en 1973 un golpe militar para ahogar en sangre ese deseo de transformaciones sociales pensado democráticamente. Por lo tanto supongo que los indígenas chiapanecos, y sobre todo el subcomandante Marcos, que ahora está en otras cosas también importantes buscando un lugar democrático en el futuro de México, y supongo que será para ellos un orgullo saber que en esos doce años se produjera un fenómeno tan extraordinario que es un ejemplo de lo que puede aportar al mundo América Latina, o sea, retomar la idea de una transformación social en beneficio de las mayorías, que simplemente en Europa es lo que hemos hecho con la revolución burguesa primera y los movimientos sociales después y la conquista del estado de bienestar, nos olvidamos frecuentemente que la historia del siglo XX, e incluso del siglo anterior, demuestra que eso es la vía del progreso y entonces como aquí en buena parte ya no lo necesitamos nos olvidamos que el hogar de la historia, donde se cuece ahora la historia en gran medida es en América Latina, y el caso de Uribe es un buen ejemplo. De lo que se trata pues es de si los historiadores vamos a hacer historia al margen de esos acontecimientos históricos que estamos a vivir de una manera tan traumática y tan dura, los historiadores bolivianos yo os digo que sí porque, por lo menos en La Paz, los responsables de la carrera de historia, del colegio de historiadores están vinculados a Historia a Debate y ya nos han dicho que el futuro de la disciplina en América Latina es ése y nosotros le prestamos atención porque a lo mejor podemos aprender algo de ellos. Por lo tanto yo pienso que en estos años últimos no es casualidad que yo haya dicho que Historia a Debate tiene trece años de vida y que entre la revuelta zapatista, armada en aquel momento que duró doce días, y la revuelta democrática de los movimientos sociales indígenas en Bolivia han pasado doce años, es que Historia a Debate no tiene relación directa con estos acontecimientos porque es un movimiento académico y no hay una relación causa-efecto, pero vivimos en un mismo mundo que está cambiando de manera global en esa dirección. Eso explica que un movimiento historiográfico latino haya adquirido esta fuerza, buena parte de la fuerza de Historia a Debate viene de América Latina, y América Latina está viviendo otra historia y haciendo otra historia nueva, entonces no nos debe extrañar que la historiografía que ellos apoyan, como en este caso Historia a Debate, alcance la fuerza que alcanza hoy y que podamos decir que es un fenómeno único desde el punto de vista internacional, lo que pasa es que nuestra práctica ha ido por delante de nuestra teoría y esta exposición es un intento de empezar ya a reflexionar sobre lo que hemos hecho en esta última década de Historia a Debate y por qué hemos llegado hasta aquí y por qué a través del español y por qué a través de Internet, y dónde estamos y hacia a dónde vamos, porque aunque dirigimos esto son las circunstancias las que nos permiten llegar hasta donde hemos llegado hasta ahora. Yo creo que Historia a Debate como red ofrece tres novedades, o por  lo menos promueve tres reflexiones sobre cosas nuevas que tienen que ver con lo latino, con la historia, con la historiografía, con el mundo en el que estamos ahora en el siglo XXI: primero la redefinición de lo latino en la era global, segundo el haber puesto en práctica un intercambio de igual a igual entre Europa y América latina y hemos demostrado que es posible que se haga en Europa un congreso donde haya ponentes latinoamericanos y ponentes europeos, cada uno hablando en su idioma como es nuestro caso, y al mismo nivel todos aprendemos y todos enseñamos, ese intercambio igual no dependiente, no colonial, sobre todo para España porque fueron nuestras colonias. Hemos demostrado que es posible, y yo diría que necesario que exista una voz propia latina en la comunidad académica internacional de historiadores. Yo creo que Historia a Debate representa una nueva historiografía latina global por tres circunstancias objetivas: la primera la temática a la que nosotros dedicamos tiempo, es un temática bastante abandonada entre los historiadores aunque últimamente se cultiva más y es la temática de la historiografía, de la metodología, de la epistemología, y de hecho existía un gran vacío, pero al mismo tiempo una gran urgencia por parte de los historiadores más inquietos por su profesión de tratar esos temas: desde el concepto de historia, hasta nuestra relación con las fuentes o con las tendencias historiográficas en las que nos hemos formado y que hoy en día ya no están activas, por lo tanto  primero hemos tratado un temática que estaba abandonada; segundo Internet y tercero el idioma, es decir, que nos hemos basado a los pocos años nuestra actividad, nuestra sociabilidad académica en Internet, y en tercer lugar nos hemos beneficiado del papel que juega hoy el español en el mundo en general, pero muy particularmente en el mundo académico y más particularmente todavía en el mundo de Internet, en Internet el español es ,después del inglés, el segundo idioma más utilizado entre los internautas, claro entre el ingles y el español está el japonés y el chino, yo creo que en este momento estamos en el tercer lugar y que solamente por debajo del chino, según las últimas estadísticas, ya es una enorme novedad que el español esté por delante del francés, del alemán y del italiano, es obvio porque en el mundo global el número de castellanoparlantes son millones, hay muchos más hispanoparlantes fuera de España en toda América Latina y cada vez más en los Estados Unidos y eso nos ha permitido en las relaciones internacionales académicas dejar muy atrás a la francofonía y al mundo germánico y al mundo italiano, nos hemos beneficiado de esto, pero también quería decir que Internet y el nuevo rol del idioma español en el mundo y particularmente dentro de Internet está cambiando el concepto de la trinidad, después ya veremos; estas son las circunstancias objetivas que han permitido que creciera Historia a Debate: la temática, Internet y el idioma, y el factor subjetivo que nos hemos planteada, al principio parecía una cosa que no iba a tener mucho éxito, en 1993 llevar el congreso a santiago de Compostela, la Xunta de Galicia, que es el gobierno autónomo nos aportó unos fondos porque decíamos íbamos a organizar una peregrinación internacional de historiadores de todo el mundo para debatir sobre el estado de nuestra disciplina globalmente en Santiago de Compostela, lo hemos repetido en el año jubilar xacobeo de 1999, en el xacobeo de 2004 y lo repetiremos dentro de unos años en el xacobeo 2010. Por lo tanto ya nos pusimos nosotros en línea de este desarrollo global muy precozmente, cuando eso no era tan evidente, cuando estaba más cercano la caída del muro de Berlín digamos que la globalización, en ese sentido pues podríamos haber acertado o habernos equivocado y acertamos, porque para el siguiente congreso nos pasamos con armas y bagajes, no sé si esa frase se entiende, supongo que sí porque es muy literaria además a Internet. Creamos este nuevo espacio académico multinacional, esa nueva forma de entender la latinidad académica que no termina, que no acaba con las identidades anteriores de tipo nacional fundamentalmente, sino que se superpone, no sustituye, redefine las identidades latinas anteriores en este mundo global, entonces la paradoja de la globalización diluye las fronteras pero refuerza las identidades locales regionales, nacionales, continentales y también, que eso es la gran novedad en América Latina las militias indígenas que hace que muy probablemente los países que tengan mayoría indígena acaben teniendo presidentes indígenas, no sólo por su origen, como a lo mejor Toledo, si no además por su programa político como es el caso de Evo Morales, y eso lo pongo como ejemplo que para el que no conozca América Latina no sabe hasta que punto eso trastoca todo, perturba todo, y soportan muy mal los criollos e incluso algunos mestizos a un presidente indio, y eso no sólo está pasando con el actual presidente de Bolivia, pasó con otros, pasó en Perú y eso que era una persona que no mantuvo una política acorde con las mayorías sociales. Es un buen ejemplo para vosotros que sois hispanistas, o os interesa de alguna manera el mundo latino, de lo revuelto que andan los tiempos, que eso pone en crisis muchas cosas, pero es también una fuente de oportunidades para hacer cosas nuevas. Somos una comunidad académica de nuevo tipo, yo tengo aquí: no sujeta a jerarquías tradicionales, académicas, gremiales, políticas, nacionales… menos sujetas que otras comunidades académicas a este tipo de jerarquías en las cuales se apoya la universidad, porque la universidad históricamente en la Edad Media funciona desde la relación entre maestro y alumno, hay una relación jerárquica que incluso las reformas de los que éramos dirigentes estudiantiles en el año 68 no logramos, logramos otras cosas, logramos que hubiera acceso a la universidad de las clases populares, pero no logramos que la universidad cambiara este estilo jerárquico que nos caracteriza, que tiene sus aspectos positivos y tiene sus aspectos negativos, entre otras cosas porque inmediatamente sustituimos a los viejos profesores y empleamos entonces el mismo sistema que los viejos profesores, no es tanto así, la universidad en ese sentido también cambió, en la universidad que yo estudié no se elegía democráticamente a nuestros órganos porque vivíamos obviamente en una época de dictadura y hoy eso sí se hace y hay un funcionamiento más democrático de las universidades, pero eso nos preocupaba mucho porque si nosotros llevábamos la jerarquía académica a los congresos, el saber se paraliza, se esteriliza porque el saber creativo, el saber innovador necesita libertad para manifestarse, eso lo sabemos todo, y eso lo hemos podido resolver porque tenemos una voluntad de actuar de contrapeso de la jerarquía académica, es decir, que una persona por ser catedrático lo que tenga que aportar a un congreso no tiene porque valer tanto como un doctorando, a lo mejor tiene cosas más interesantes que decir un doctorando, ya el pobre doctorando se tiene que examinar con un tribunal de profesores al menos que tenga un lugar donde expresarse al menos de una manera libre, y que su aportación sirva igual incluso a la hora de la publicación que un profesor más consagrado, pero eso os digo sinceramente: nos llamamos Historia a Debate porque le damos una gran importancia la debate, el debate no es un uso académico y exige también una actitud a contracorriente para imponer el debate en la universidad, en ese sentido las mesas redondas siempre han tenido una gran importancia en nuestros congresos mayor que en otros, pero no hemos logrado esa horizontalidad, esa democracia académica, ese debate permanente en tan gran medida como en Internet, Internet: la globalización tiene aspectos negativos y positivos, pues ahí está uno de los aspectos positivos de la globalización, que es un medio barato, accesible y democrático si se utiliza bien, y ahí es donde nos hemos desarrollado plenamente y hay debates todos los días, cualquiera que se acerque a nuestros debates -eso lo tenéis en nuestra página Web, después diré la dirección- sabe que en general somos en la inmensa mayoría profesores pero si algún estudiante quiere participar no ponemos en la firma que es estudiante, si el quiere opinar que opine, tampoco ponemos nada de jerarquía en la firma, sólo la universidad a la que pertenece, creo que ahí está parte de la explicación de la continuidad de Historia a Debate y su expansión permanente, una espontaneidad de temas académicos y de temas de actualidad que no existe probablemente en ningún otro sitio. Por lo tanto, la horizontalidad que permite Historia a Debate facilita que surja lo nuevo, que haya debate porque garantiza una libertad de la cual nos encargamos desde la coordinación en Santiago de Compostela y, esto es muy importante, permite, yo diría incluso que obliga a pensar con la propia cabeza del que participa, es decir, que por las características de los debates digitales, que son debates breves -algunas veces los colegas ponen bibliografía y hacen referencia a otros autores consagrados, pero no es lo habitual y el espacio no se presta a eso- de manera que la cita de autoridad no vale, lo que vale es tu opinión personal, y las opiniones personales en nuestros debates si se estudian demuestran que se pueden decir muchas tonterías, pero también se pueden decir muchas tonterías en los papers lo que pasa es que están escritas de otra manera en revistas especializadas, en editoriales, etc… y a veces no nos damos cuenta que no hay nada de nada, que no hay ninguna idea debajo, hay sencillamente un ejercicio académico, y yo a veces me he encontrado, personalmente ya, en alguna intervención una opinión que vale más que un artículo y a veces que un libro por la manera que tenemos nosotros de enjuiciar el trabajo académico en artículos y en libros, y otras veces se escuchan muchas tonterías, pero las tonterías también son importantes porque nos permite saber como está nuestra profesión, cosa que a través de los libros y de las revistas no podemos saber como está nuestra profesión porque nos ponemos todos una máscara académica cuando escribimos, menos cuando damos clase, los alumnos se pueden dar más fácilmente cuenta como es el profesor y lo que piensa, cuales son sus ideas y eso no es tan fácil en los artículos y en los libros porque nos ponemos una máscara, y necesitábamos saber cómo estaba nuestra profesión para, sabemos de donde venimos, pero sobre todo saber a donde vamos, como en nuestro caso saber a dónde va el oficio del historiador; y eso nos permite hacer un ejercicio diario de sociología académica para ver como está nuestra profesión, y nos llevamos verdaderas sorpresas en ese sentido, tanto individuales, de algún colega que me dice que “yo no sabía que fuera así” leyendo sus intervenciones, pero sobre todo colectivas, cuando se inicio un debate a veces se puede prever las posiciones que va a haber pero no siempre y eso nos permite saber lo que tenemos, cosa que en el contacto académico intelectual entre nosotros, en las facultades, entre los despachos te enteras de lo que piensan los más próximos individualmente, pero perdemos la imagen global de cómo está la propia profesión. Nosotros tenemos muy claro que es un movimiento académico, prácticamente yo conozco muy pocos colegas que participan por lo que sé en los foros de Porto Alegre, uno, dos o tres y sin embargo vivimos paralelamente, desde 1999 hasta hoy estamos viviendo una historia parecida, un movimiento académico global paralelo que se inicia en Seattle desde el punto de vista del movimiento de antiglobalización, altermundista, en 1999 y se inicia, en lo que respecta a Internet, que es lo que más nos importa en Santiago de Compostela en 1999 y hemos avanzado con la misma velocidad, claro, decís vosotros, ¿y eso tiene que ver?, pues sí, porque ahora mismo estamos viviendo todo el proceso de homologación de Bolonia de nuestros estudios que va a trastocar lo que es el sistema universitario en toda Europa y eso es parte institucional del proceso de globalización, pero es que a nosotros no interesa muy especialmente la evolución de los movimientos sociales porque la historia comprometida y renovadora en la que nosotros hemos sido formados por la escuela de Annales y por el materialismo histórico guardó relación, en su momento, con los movimientos sociales, y particularmente en el caso del marxismo con el movimiento obrero, igual que nos interesa el movimiento feminista para la historia de género y para la historia de las mujeres, o el movimiento ecologista para la historia ambientalista, la historia ecológica, y estoy hablando de la relación entre sociedad e historia, de la historia que se escribe y de la gente que quiere incidir en la historia a través de movimientos sociales. Tiene mucho interés saber, ver como rápidamente desde Seattle y desde el primer Porto Alegre vivimos un movimiento acelerado, un movimiento social acelerado que cuando yo di la primera conferencia sobre este tema terminaba el quince de febrero del año 2003 con los quince-veinte millones –según quien lo diga- de manifestantes contra la guerra de Irak, yo sé que aquí en Bruselas hubo un movimiento de la sociedad civil, pero pienso que el país, probablemente del mundo, donde hubo un movimiento de la sociedad civil más importante en contra de esa guerra fue en España donde hubo manifestaciones de tres millones de personas, yo le decía al profesor Canaparo que en España en los últimos cuatro o cinco años ya la gente no vota sólo, se manifiestan cientos de miles, fácilmente se llega en una jornada a un millón, dos millones, y eso lo hacía antes la izquierda y ahora con el gobiernote Zapatero lo está haciendo la derecha, es un hábito que está cambiando la manera de ejercer la democracia, ya tenemos una democracia directa, votamos y la gente se manifiesta muy masivamente cada vez que está descontenta con las medidas del gobierno, y la última gran manifestación que nos afecta al tema que nos ha traído aquí es la huelga general de los hispanos en Estados Unidos en el último primero de mayo, es muy importante porque el tercer pie en el que se apoya la latinidad, en mi opinión, además de lo latinos europeos y en América Latina, es el mundo hispano en Estados Unidos, en ese sentido vivimos un auge de la sociedad civil que la historia no conoce en ninguno de sus periodos históricos, y los movimientos sociales que conocimos, revoluciones nacionales en el siglo XVII, en el siglo XVIII, todos lo sabemos, incluso los movimientos sociales del siglo XX en que participamos, yo, como antiguo dirigente estudiantil en la universidad en que estoy de profesor, la última vez que nos manifestamos contra la LOU, éramos cuarenta mil profesores y alumnos, y había treinta y cinco mil manifestantes y el movimiento estudiantil hace manifestaciones que superan a veces el millón, entre manifestaciones y huelgas,  cuando ha habido razones importantes, vivimos un movimiento en una sociedad civil de una importancia cuantitativa y cualitativa con una incidencia en la vida de los países y en la vida del mundo que nunca se vivió en otro periodo de la historia, porque siempre fueron movimientos mucho más reducidos, elitista en el siglo XIX y en el siglo XX parecían más masivos pero por las propias características mucho más reducidos, sobre todo en la universidad que eran universidades muy reducidas, no como en este momento: en España éramos ciento cincuenta mil en el año 68, yo estaba en la Universidad Central de Madrid en aquel momento y ahora en toda España hay millón y medio de estudiantes, igual pasará aquí en Bélgica, se le llamó el siglo de las masas al siglo XX, pero el verdadero siglo de las masas es el siglo XXI, y además porque las masas de todos los continentes quieren vivir felices en este mundo, no solamente Europa y otros lugares , en un mundo así la historia tiene que escribirse de otra manera y tiene que prestar atención a lo que sucede a su alrededor, yo creo que en Historia a Debate en ese sentido estamos en una posición de ventaja como red global porque lo que nosotros estaos viviendo es un anticipo de lo que viene, del mundo que viene. Mi primer trabajo, que fue la conclusión del primer congreso lo titulé “La historia que viene”, muy arriesgado en aquel momento, pero hoy creo que realmente los lectores son más benévolos ya reconocen que en ese sentido algo pasó en aquel primer congreso que nos hizo intuir un futuro que iba en esa dirección mucho cuando no sabíamos que íbamos a tener la ayuda de Internet. Inauguramos el año que viene en mi universidad un postgrado de metodología, historiografía, teorías de las ciencias de las humanidades y de las ciencias sociales que coordino yo, y estamos desde HaD ayudando a este postgrado, y mi aportación va a ser sobre la sociabilidad académica en la nueva era a partir del ejemplo de HaD como ejemplo para otras disciplinas; ya dije antes como los latinos en HaD se ha demostrado que podemos estar por delante de otras culturas en esto de adaptarnos a la globalización, en este caso desde el punto de vista de la universidad, porque hay una masa de hispano hablantes enorme que es la segunda masa de hispano hablantes de un solo idioma en el mundo global después del inglés, en el mundo occidental, no podemos superar en Oriente a los chinos. Dije que hablaría del cambio de concepto de latino con la globalización: claro, lo latino nace en la antigüedad clásica y llega hasta hoy en día y en un momento pasa de Europa a América, yo creo que ese fue el primer cambio de identidad de lo latino, ese salto de Europa a América, y el segundo lo estamos viviendo ahora. Eso nace en la tierra de Claudio, en el Lacio, en la Italia romana, llega un momento en que en Europa latinos son los que hablan latín como un idioma impuesto a partir de Roma, en la Edad Media que es mi especialidad académica por cierto, vivimos una diversificación a partir del latín vulgar, de las lenguas romances y así surge el italiano, el portugués, el francés y en España el castellano, el gallego, el catalán, todas las lenguas y pasan a ser en la Edad Media los latinos los que hablan las lenguas romances, ya no sólo el latín que queda reducido como sabemos a los medios eclesiásticos. Pero decía que el gran salto es cuando, sobre todo españoles y portugueses, van a colonizar América del centro y América del sur y entonces lo que para nosotros es la Edad Moderna, el Antiguo régimen, para ellos es la época colonial y se coloniza sobre todo a través de la Iglesia al mundo indígena y empiezan a hablar español, portugués, fundamentalmente, ya tenemos una ampliación de lo latino que incluye el mundo indígena, y ya la época que llamamos contemporánea en Europa, que para ellos es la época de la independencia, queda en el nombre de América Latina o Latinoamérica, más reducida a los estados independientes que surgieron al sur del río Grande, y en este momento se ha cogido un poco el uso del término latino porque si queremos incluir a Brasil y al mundo luso tenemos que hablar de Iberoamérica más que de Latinoamérica, entonces lo latino sería lo que se ha manifestado en Historia a Debate de una manera libre, en HaD hicimos una encuesta internacional en el año 1999, enviamos a todo el mundo invitaciones en español, inglés y francés, trabajamos en todos los idiomas, en ese sentido nos diferenciamos de ingleses y franceses, somos una tradición multilingüe, aunque se trate de una iniciativa que surge en el mundo latino, ¿pero quienes responden más?  Responde más los que se consideran más cerca, y por lo tanto se trata de una experiencia empírica, los que al final conforman nuestra red académica, y por tanto una nueva identidad latina global, es una mesa que tiene tres pies, eso es interesante para otros que en otros campos académicos quieran trabajar en esta misma dirección, si quieres crear algo global desde el punto de vista latino tienes que contar con Europa y el puente es a través de España naturalmente, también lo es en la Unión Europea el puente entre Europa y América Latina, tienes que contar con América Latina y el mundo hispánico de Estados Unidos donde hay más de veinte millones de latinos, veinte millones de hispanos que, bueno, es la mitad de la población español, la participación norteamericana, fundamentalmente a través de los profesores hispanos en la red de HaD empezó con mucha fuerza y tuvo un enorme bajón después del 11 de septiembre, todavía no se ha dado la recuperación de la participación norteamericana en nuestra red en estos últimos cinco años, lo cual demuestra nuestra percepción: la decepción que produjo no el atentado terrorista sino la reacción del gobierno al atentado terrorista, de todas maneras todos tenemos la esperanza de que este fenómeno nuevo en Estados Unidos, del último lustro por lo menos, que es la manifestación de los hispanos estos últimos días, tenga su incidencia en la universidad y consigamos una mayor participación en nuestras actividades de los profesores de origen hispano de las universidades norteamericanas.

Nos encontramos con que en España, América Latina y los sectores hispanos de las universidades norteamericanas tenemos una comunidad de lengua, una comunidad de cultura, una comunidad de evolución académica desde el punto de vista de la historiografía y ciencia de las mismas tendencias en un momento dado, los mismos problemas, y que la historia común nos puede permitir a los mismos problemas plantear respuestas distintas. Por lo tanto, en función de esta experiencia creo que van a resultar marginadas determinadas resistencias que hay a este fenómeno de que exista una voz latina en nuestro medio académico internacional que hemos vivido, concretamente yo me acuerdo muy bien en aquel congreso de 1999 que se manifiesta no públicamente, pero están ahí, mentalidades de exclusión, cerradas, jerárquicas, en España una mentalidad metropolitana que te decía: no aportan nada, vienen aquí a hacer nuestras tesis, en América Latina, por el otro lado, una mentalidad dependiente, incluso a veces cayendo en el complejo de inferioridad, pensando que no se puede aportar nada propio, nada más que aprender de los países más avanzados, lo que en México se dice malinchismo, la Malinche fue la indígena que se arrimó a Hernán Cortés. Y después en Estados Unidos ese hegemonismo que conocemos todos, el inglish only, solamente inglés y que se ha manifestado últimamente en la protesta de George Bush diciendo que no le gustaba que los hispanos hubieran traducido la letra del himno norteamericano al español. Todo eso va a quedar a tras porque el mundo global es esto, una nueva multiculturalidad que obliga a aceptar que no hay una lengua dominante, que no hay país dominante y que vivimos en un mundo de todos y además, los que llevan la de perder en ese mundo de todos ya se encargan de recordar todos los días que ese mundo es de todos, y en nuestro caso además no estamos tratando de un problema de lo que se llamaba el tercer mundo, parte de la latinidad, que nació  en Europa, y estamos hablando de las relaciones entre Europa y América.

Por lo tanto, este intercambio igual que propugnamos nosotros entre España y América Latina yo pienso que es un intercambio  relativo, tampoco quiero presumir que no haya diferencias entre lo que va de Europa a América y lo viene de América a Europa, pero está resultando eficaz, es bilateral, yo pienso que cambia lo que fueron las relaciones académicas internacionales en el siglo XIX y XX, todos los focos son posibles y se acabó eso que conocimos, primeo desde Alemania, después desde Francia y ahora algunos lo pretenden desde Estados Unidos, es decir, un país avanzado económica, política y culturalmente impone la orientación de una disciplina académica a todo el mundo, primero lo hizo, afortunadamente, porque fueron pasos positivos, sólo  digo  que eso ya no corresponde al siglo XXI, yo no digo que eso no haya supuesto un avance para nuestra disciplina, el positivismo nos lo enseñaron desde Alemania a finales del siglo XIX, principios del siglo XX a toda Europa y después a todo el mundo, la escuela de los Annales desde Francia a toda Europa y con bastante influencia internacional, incluso el marxismo, la escuela más avanzada  de Past and Present desde Inglaterra a todo el mundo, y últimamente el postmodernismo desde Estados Unidos, pero eso en el mundo ya no es así, hoy para tener una influencia internacional de tipo académico ya no es el seguimiento de un país como algunos piensa sino cada vez más van a ser redes globales las que influyan globalmente, y la demostración es que los focos nacionales del siglo pasado ya ahora han dejado de emitir, se han agotado, y los nuevos focos que surgen son redes que nacen como red internacional, incluso en el caso de que se trate de una red protagonizada exclusivamente por la influencia en un solo país, vivimos en un mundo donde las redes globales son las futuras tendencias académicas y lo estamos comprobando ya. Claro, y podéis preguntar ¿qué ha aportado América Latina a HaD? A mi me gusta decir tres cosas, porque hay que demostrarlo, son universidades donde los profesores se han formado en Europa y en Estados Unidos, sí, pero eso fue hace mucho tiempo, ahora han vuelto a esos países y ya son profesores, y ellos mismos ya dirigen tesis y ya crean escuela, aquellos que están cercanos a nuestro planteamiento, porque no todos, representamos una buena parte de la historiografía española, una parte de la historiografía latinoamericana, aquellos, como lo vimos en aquel congreso de 1999, ilusión y sobre todo compromiso con la sociedad, que en Europa parecía una cosa antigua, para los marxistas duros de los años 60 y 70, y yo creo que es algo que está por todos los lados en este siglo que viene. Los debates que practicamos todos los días en Internet yo estoy convencido que sin la participación norteamericana no tendría la vivacidad que tiene, lo digo como español por porque también hay participación española, pero es una participación diríamos tímida, porque la universidad española es más academicista que la universidad latinoamericana, por lo menos algunos profesores de universidades latinoamericanas, sin ellos muchos debates quedarían muy cojos, estoy convencido, y después, que las mayores aportaciones vienen de la relación entre historia y sociedad, voy a poner solamente dos ejemplos donde ellos superaron sector de HaD academicista, y yo creo que nos han dado un ejemplo cara al futuro: lo que llamamos historia inmediata, es decir, ampliar el objeto de estudio del historiador hasta los acontecimientos del presente superando el mito positivista de que para ser imparciales hay que esperar que pasen cincuenta años, cuando en realidad es un problema ético y para ser honestos con los documentos y con las fuentes simplemente no hay que dejar esperar nada, porque hay que ser sencillamente honestos intelectualmente, es un problema de deontología, de honestidad y nada más. Ellos, por compromiso con la sociedad, ampliaban sus tesis hasta el presente y nos dado un ejemplo de algo que Europa se decía pero no se hacía, se decía que había que hacer historia del tiempo presente, del tiempo actual y se hacía historia, en el caso de  Francia, hasta la II Guerra y en el caos de España hasta la Transición, y ahí hemos aprendido a llevar hasta el momento presente nuestros estudios históricos; y después  algo que es muy importante para España: la recuperación de la memoria histórica, está pendiente de una ley del gobierno de Zapatero de recuperación de la memoria histórica para rehabilitar a los vacíos de la guerra civil, sobre todo a los desaparecidos de la guerra civil que fue un holocausto, no tan grande como el que produjo el nazismo, pero de cientos de miles de personas que fueron asesinadas por sus ideas y que están en fosas comunes y lugares desconocidos. Esto, a recuperación de la memoria histórica, lo hemos aprendido de las abuelas y de las madres de la plaza de Mayo y lo hemos aprendido de los historiadores que, junto a ese movimiento social de los desaparecidos en la época de la Junta militar en Argentina, se han puesto a investigar con criterio académico esos años tan cercanos y tan dramáticos y tan duros, y eso nos lo han enseñado colegas de América Latina, y nos han demostrado que la transición española de la dictadura a la democracia no había sido tan modélica porque había sido hecha sobre el olvido y no sobre la memoria. Por eso algunos colegas de mi generación que pensaban que podíamos estar equivocados y que había que dedicarse a la vida académica exclusivamente, con todo el derecho del mundo, pues se han equivocado, o nos hemos equivocado en alguna medida en una cosa, en que eso no era, insisto, el pasado erróneo que había que superar sino que es el futuro, y de hecho en España las tres tendencias actuales en nuestra disciplina, que es la disciplina de la historia, en todas cuidamos el compromiso con la sociedad, e HaD es la que menos, porque la segunda es los partidarios de la idea histórica de España, un poco como reacción a la fuerza de los nacionalismos periféricos y la tercera es la recuperación de la memoria histórica, en el caso de la idea histórica de España es algo que fue promovido por el gobierno del Partido Popular, con el apoyo de historiadores y ha abierto una vía de volver sobre viejas investigaciones, activa, importante, con independencia de que es un tema que está a debate, y los grupos de familiares que iniciaron el movimiento de recuperación de la memoria histórica para saber donde estaban sus seres queridos asesinados en el año 36, 37, 38… eso generó un movimiento primero donde participaron profesores de enseñanza media y ahora ya tiene su fuerza en la propia universidad. Por lo tanto las novedades historiográficos son de historiadores comprometidos con su tiempo, nosotros más bien en el campo que nos compete, que es perfilar el oficio de historiador, pues más bien lo definimos y lo defendemos explícitamente, pero todos estamos en esa línea, en decir la historiografía del futuro tiene que ser como este mundo que nos toca vivir, un mundo solidario, en un mundo donde no puedes permanecer en los despachos ajeno a lo que sucede a nuestro alrededor.

Pues bien, yo ya termino con esto para dejaros tiempo para lo que viene y terminar el curso que os ha impartido el profesor Canaparo. Después de estos trece años yo creo que la historiografía tiene una voz propia a través de nuestra comunidad académica internacional, única en sus características, también en el ámbito no latino, lo que nos distingue no es porque cosas que se hacen en HaD no se hagan en francés, en inglés o en alemán, pero en ningún sitio lo hacen todo al mismo tiempo, por ejemplo, hay listas de correo electrónico de debate sobre la historia; hay quien organiza congresos, si bien de este tema  metodológico e historiográfico  no muchos, yo no sé si seremos los únicos, de esta forma monográfica. Tenemos además un apartado “Academia Solidaria”, que a veces otros también practican. Decía  que  a un historiador boliviano que no lo dejaron entrar en Estados Unidos e incluso la Asociación Americana de Historia se solidarizó con él, nosotros hacemos campañas con alguna frecuencia… HaD  es el único caso donde hacemos todo esto a la vez, además de investigar sobre el método y la teoría y proponer alternativas historiográfica desde el concepto de  historia hasta la relación de los historiadores con la sociedad. HaD se  trata de una red y  movimiento articulados de características bastante inéditas, y es por tanto la primera vez que surge de forma original una tendencia historiográfica propiamente nuestra, latina,  porque, tanto en España como en América Latina -y yo creo que en Bélgica también con respecto de Francia- tenemos unas historiografías que han sido muy dependientes, receptoras de las novedades que han venido de países más poderosos económica, cultural y políticamente. En España las innovaciones en el último periodo del franquismo, tanto el marxismo como la escuela de Annales, vinieron a través de los Pirineos a partir de Francia, igual que pasó aquí por lo que yo sé, al menos respecto a la escuela de Annales. Entonces, la primera vez, y con más motivo en América Latina, la primera vez que existe un movimiento historiográfico, una tendencia académica en nuestra disciplina fue creada por nosotros mismos, y ha sido posible porque nos hemos unido a los dos lados del Atlántico demostrando que existe un lazo trasatlántico  a través del inglés que es mayoritario, lo reconocemos, pero inmediatamente después hay una manera de establecer una relación entre América y Europa que es a través del español y en este caso, en nuestro campo académico, pero en otros también es posible. Nosotros el 11 de septiembre del 2001 redactamos, pusimos en limpio, se dice en español, negro sobre blanco, dieciocho proposiciones, nuestra propuesta para el oficio de historiador y la escritura de la historia en el siglo XXI, lo tenéis aquí, he traído unos ejemplares de un manifiesto historiográfico que ahora tendremos que revisar, dieciocho proposiciones desde la definición de la historia hasta el relevo generacional que en el año 2003 habían firmado 239 colegas de 24 países y tres años después somos más de 400 colegas de 37 países. Ahí estamos ocupando un espacio que deja la fragmentación académica, pero animamos a otros para que hagan lo mismo en sus áreas culturales respectivas y mientras crecemos, y para crecer queremos dar dos pasos al frente ya: ahora estamos pendientes de la edición de las actas del último congreso que se han retrasado, inmediatamente vamos a crear grupos de investigación en red para aplicar nuestros planteamientos historiográficos internacionalmente, cosa que nunca se ha hecho, por lo menos de una manera abierta y con tantas universidades, pienso que va a ser una nueva vía de avance en la historiografía global que defendemos; y otra cosa que nos inquieta mucho es el tema de la lengua, porque claro, en los congresos utilizamos la traducción simultánea, los historiadores angloparlantes y francoparlantes se sienten cómodos aunque la mayoría intervenimos en castellano, también en portugués, en gallego o catalán, porque todos procuramos en España, en congresos internacionales, hablar español. Claro, allí no hay problema porque hay traducción simultánea, incluso para los debates, pero en Internet la traducción simultánea va retrasada, en Internet domina entonces el castellano, y eso, podríais decir, es bueno, sí es bueno porque es nuestra red, pero al mismo tiempo impide que nuestra manera de entender la profesión llegue al mundo francófono o al mundo anglófono y germanófilo. Una vez planteamos el debate de sacar una lista paralela en inglés, sorprendentemente los colegas no querían, que aprendan ellos español, toda la vida hemos tenido que ir a Francia, en general un historiador español o latinoamericano avanzado sabe inglés, sabe francés, mi generación era más del francés y ahora del inglés, no tenemos más remedio que meternos con el inglés en todo, sin embargo una persona, sobre todo en Francia, no considera necesario aprender otro idioma -un profesor-, y en Estados Unidos el movimiento de solamente inglés va en la misma dirección, eso choca con el mundo multilingüístico, el mundo es multifocal, multilateral, es el gran error de G. Bush, y está fracasando, o es o no es, ya no se puede como en la época imperial dominar el mundo a través de un centro, se demostró en la guerra de Irak porque se opuso buena parte de Europa, la Liga Árabe, incluso la Organización de Estados Americanos y eso que en muchos de estos sitios hay muchos amigos de los Estados Unidos, aquí en este caso Blair y Aznar, que probablemente eso cambie si cambian los gobiernos en esos países, en España ya cambió, ahora ya no estamos en ese eje, hemos vuelto a la vieja Europa. Entonces nosotros tenemos un 15% de miembros en nuestras listas y probablemente un porcentaje mayor de visitas en nuestra Web que son anglófonos y francófonos fundamentalmente, y hacemos unas traducciones automáticas que permite Google o cualquier programa de estos para traducir diariamente todos los mensajes y además muchos son colegas muy relevantes que siguen a través de esas traducciones automáticas horrendas nuestros debates y estamos esperando que los programas gratuitos de traducción automática se perfeccionen de tal manera que nos permita ser más globales, porque además tenemos la voluntad, cosa que esa voluntad no existe, porque yo cuando veo que existen colegas en Estados Unidos o en Francia que no tienen la voluntad de abrirse a otras culturas y otras lenguas, y eso es un freno tremendo para el desarrollo de esa disciplina académica, incluso de esas universidades, es lo que hablábamos del programa Erasmus que, o es bilateral, o eso muere, vosotros si queréis ir a mi universidad tenéis que saber español por el programa Erasmus, porque mis alumnos cuando vienen aquí a lustra universidad lo primero que yo le exijo, yo soy tutor de esos programas con otros profesores, el verano anterior tienes que encerrarte para aprender el idioma porque es necesario saber idiomas para moverte en el mundo global y entonces toda propuesta académica -y eso los gestores de las universidades lo saben bien- de profesores que no sea multilingüística no tiene futuro, y yo no digo que para un anglófono eso sea difícil que lo entiendan, porque sumando Estados Unidos e Inglaterra y lo que fue la Commonwealth tienen mucha influencia, pero que no se equivoquen, porque el peso relativo del inglés en Internet se reduce año tras año porque cada vez irrumpen más otras lenguas y los que estamos más inmediatamente favorecidos somos los hispanos, los latinos porque además tenemos más claro que un alemán, que un francés y desde luego que muchos norteamericanos y muchos ingleses que en el mundo que viene hay que hacer proyectos multilingües, nuestra página Web está en inglés, en francés y en castellano naturalmente, además, los que la visitan vienen la mitad por la parte castellana y la otra mitad por la parte anglófona y francófona, lo cual quiere decir algo que yo en mi juventud, cuando tenía vuestra edad escuché de algunos colegas, kistas?, la ventaja del retraso, es decir que si tú estás retrasado en una época histórica para la época siguiente tú puedes estar en primera línea.

Nada más, animaros a uniros en este proyecto si sois historiadores -si no lo sois, también, pues todo es historia- porque la historia será más latina si es más global, el mundo será más global si es más latino (para saber más  visitarnos en www.vps12.h-debate.com).

 

 

DEBATE

Como ya dije al principio a mi me parecía interesante que Carlos hablase porque en el fondo, como está implícito en lo que él dijo, en la profesión que hagáis vosotros, sea que esté conectada al mundo académico sea que esté conectado al mundo privado, los recursos que plantea Internet no sólo en el tema laboral como herramienta que tenéis que utilizar, sino que es también que plantea un nuevo desafío de conocimiento, plantea una nueva forma de comunicación entre los individuos y una nueva forma también de afrontar los problemas, y a mi me parece que el grupo que lidera Carlos ha hecho vanguardia en este, en el sentido de que no sólo utiliza los recursos de interés para lo obvio, contactar, sin o que ellos han planteado desde el principio que Internet representa una cuestión diferente, que no sólo cambian las relaciones de conocimiento si no que también cambian las relaciones humanas y eso tiene consecuencias a mi me parece a muy largo plazo, en ese sentido me parece interesante la manera que ellos tienen de afrontar Internet, no es una manera meramente informativa, es una manera de conocimiento, todo depende de cómo se la enfrente, por eso me parecía interesante que conocieran la experiencia. Ahora ustedes tienen la dirección y la palabra, siguieren hacer alguna pregunta, saber algo este es el momento:

 

– Usted ha hablado de política y de su relación con la red de debate, ¿puede explicar.

 

Sí, pero para nosotros es un objeto de análisis para considerar lo que eso puede afectar a nuestros debates académicos, ahora, yo recuerdo que inmediatamente después de la revuelta zapatista, a parte de interesarme a mi individualmente por mi propia biografía y como ciudadano, me parecía que eso suponía un antes y un después en los temas que discutíamos en la idea de progreso, en el estudio de los movimientos sociales, en el proceso de globalización, hice un trabajo que se situaba Chiapas y la escritura de la historia, al principio no estaba muy convencido, pero también fue una sorpresa para los propios zapatistas saber que aquello fue el comienzo del movimiento antiglobalización. En ese sentido creo que la importancia histórica de Bolivia viene en el sentido de que con muchas más claridad que en el caso de Brasil, de Argentina y de Venezuela que tienen gobiernos de izquierda con un apoyo entusiasta de la población pobre, sobre todo en Venezuela y en Brasil, en Argentina con un apoyo de toda la población cansados de todo lo que fue la historia de ese país desde la Junta militar. Sin embargo en ningún sitio se ha dado con tanta claridad que una mayoría social marginada, como son los indígenas en un país con mayoría indígena, por la vía democrática combinado con las movilizaciones sociales que allí les incomoda, les preocupa –en América Latina- pero es que nosotros en España lo hacemos también, la universidad se manifestó en contra de la LOU, cambió el gobierno y va a cambiar la LOU, allí les molesta que los indígenas lo hagan pero tienen todo el derecho del mundo porque la democracia desde la revolución francesa está basada en el sufragio universal y en el derecho de todos a votar, eso se fue aplicando lentamente; en ese sentido el que una mayoría de movimientos sociales, sobre todo del mundo indígena, haya logrado una mayoría absoluta en unas elecciones y que quiera aplicar un programa con el cual, gracias al cual han sido votados, supone un cambio desde el punto de vista de la democracia, la democracia ya no sirve sólo para mantener un sistema económico si no te sirve para todo el mundo si no te sirve para reformar eses sistema, porque en definitiva ellos lo único que quieren es reformar el sistema para tener lo que tenemos en Europa, un estado de bienestar, y sobre todo resolver los problemas de la miseria extrema de una buena parte de la población, entonces yo tengo una enorme confianza en el gobierno español de José Luís Rodríguez Zapatero porque en España hay ua tendencia a preocuparse por el problema de Bolivia por lo que afecta a las empresas españolas que están allí, sobre todo a la empresa Repsol, y claro, la vicepresidenta del gobierno Fernández de la Vega (éste es un gobierno elegido después de un ciclo de movilizaciones sociales y después de un enfado de una gran parte de la opinión pública española por las mentiras del gobierno anterior sobre el atentado del 11M en Madrid, que decían que era ETA por razones electorales, cuando ya sabían que había sido el terrorismo islámico, hubo un enfado enorme y un número muy elevado de personas que no votaban votaron a Rodríguez Zapatero para que cumpliera sus promesas) dijo que ellos defienden a todos los ciudadanos, también a las empresas españolas que están afectadas por la nacionalización y porque van a sufrir un recorte en sus grandes ganancias, que los gobernantes allí llaman coloniales, porque son unas ganancias extraordinarias que todos sabemos que es lo que han hecho las metrópolis, España, también Bélgica con los países africanos y asiáticos, esquilmar los recursos naturales y conseguir grandes ganancias, ellos hablan del fin del estado colonial, que eso es una teoría académica que ahora se ha elevado a criterio de orientación política del nuevo gobierno porque dicen que la época de independencia no terminó con el estado colonial; entonces yo espero que sea así, es decir, que el gobierno de España defienda a todos los ciudadanos, también a los empresarios, pero que determinados valores van a estar por encima de las empresas, el primer valor es que las promesas electorales se cumplen, y que ese gobierno fue elegido para nacionalizar los recursos naturales, segundo, que nosotros con América Latina no podemos tener una relación de amo a siervo, sino de igual a  igual, y por lo que yo sé y la ejecutoria del gobierno de Zapatero se va a iniciar también, en ese sentido, ante una prueba muy difícil, porque como todo gobierno europeo, estamos muy presionados por los grupos de presión de las grandes empresas, en ese sentido se va a iniciar una política de intercambio igual con América Latina porque Evo Morales en una visita a España dijo que, y lo ha repetido cuando vino a Bruselas, que “para nosotros España es una aliado estratégico”, y “esperamos de España un trato igual, un respeto al programa electoral con el que nos hemos presentado a las elecciones y hemos sido votados” eso para vosotros no significa nada, pero en España es muy importante porque Zapatero prometió el 14 de marzo a la gente que se aglomeró ante la sede del partido socialista que no iba a fallarles, que iba a cumplir sus promesas electorales, y en un plazo de días retiró las tropas de Irak y sus promesas, incluída la de la memoria histórica, las está cumpliendo, algo que ha escandalizado a medio mundo, sobre todo al sector católico conservador, es llevar por fin los derechos humanos a la minoría gay y a las lesbianas que ahora pueden casarse legalmente en España como todos sabemos, y sé que aquí eso estaba resuelto, pero nosotros hemos sido los que lo hemos dejado más claro: tienen derecho al matrimonio. Que eso suceda en Europa, en la madre de la revolución burguesa y de las ideas de la libertad, y que un gobierno cumpla con sus promesas, pero que suceda en un país latinoamericano, el país más pobre, el país con más indígenas, yo creo que eso supone un giro para la aplicación del concepto de democracia, un giro para el reconocimiento de los derechos indígenas y un giro para la propia globalización, porque lo de Chiapas fue un ejemplo simbólico y esto es una realidad, y no tiene la misma credibilidad que tiene el fenómeno venezolano, que tiene otras características más discutidas y desde luego el fenómeno brasileño que tenía que haber sido esto y no ha sido, también porque una parte importante de Brasil piensa que el futuro está con el tratado de libre comercio con Estados Unidos, pero es que los tratados de libre comercio en América Latina no es como el tratado en la UE, la UE le dedica a todos los estados muchos medios para desarrollar las zonas menos desarrolladas, eso ha beneficiado a España, yo soy de una parte de España, Galicia, que se ha visto especialmente beneficiada y ahora va a beneficiar a la Europa oriental, pero los tratados de libre comercio en Estados Unidos no existen para eso, es la ley de la selva, el mercado, que puede que beneficie a una minoría de esas sociedades, pero a  mayoría las perjudica, entonces en ese sentido  y particularmente creo que nuestra disciplina sin una idea de progreso no sobrevive, no tiene futuro, y necesitamos ver el futuro, ver el progreso; después de la caída del muro de Berlín necesitábamos ver el progreso para tener una idea progresiva, que tenga una utilidad social, en definitiva todo eso está en los estatutos de todas las universidades, los estudios universitarios, lo que aquí se enseña, los investigadores que aquí creamos, los futuros profesores, están financiados pública o privadamente para que cumplan una función social, otra cosa es que una cosa es la política y otra la universidad y eso son cosa que realmente os digo que nosotros lo analizamos como parte de nuestro debate en un apartado que se llama Historia Inmediata, a veces muy encendido porque las decisiones políticas se manifiestan, pero que tienen la enorme virtud de que son debates políticos de historiadores y también nos permite saber como va nuestra disciplina, ¿por qué vamos a ocultar la adscripción política de un historiador que en algunos temas puede ser relevante en su obra? El historiógrafo lo debe analizar, y en todo caso es una urgencia porque en nuestros debates muchas cosas tienen una dimensión actual, ideológica, política cultural, pero no podemos hacer ascos a eso; yo no digo ya que cada ciudadano vota o es militante de esto o de lo otro, eso por supuesto, vivimos en una sociedad democrática, yo digo que esos temas, no todos, aquéllos que tienen relevancia histórica nos interesan porque tienen que ver con el futuro de nuestras profesiones, de hecho el neoliberalismo triunfó y puso muchas veces, y todavía lo intenta, poner la universidad al servicio de la empresa, porque no hay una sociedad universitaria, o una sociedad civil que se enfrente a eso, incluso para una supervivencia futura de la universidad necesitamos una sociedad civil que nos apoye, que luche por un mundo donde la lengua, la literatura, la historia, la filosofía tengan un futuro, creo que esa batalla la estamos ganando como consecuencia de debatir cuestiones de teoría, metodología actuales, porque te encuentras con las cuestiones actuales. Lo de Bolivia está por ver, a mi me gustaría decir que incluso independientemente de cómo acabe va a ser muy importante, porque desde luego no va a acabar como el Chile de Allende, porque ya los tiempos no son para eso, por lo tanto, como no van a poder reprimirlo con sangre, lo que puede pasar un día es que otros ganen las elecciones, y las conquistas ya ningún gobierno por muy conservador que sea las puede echar para atrás porque no lo permitiría la sociedad. A  mi me ha tocado en un viaje académico a Ecuador ver la  última película que hizo Guzmán, creo que se llama, sobre Allende, una cosa tristísima, la sala estaba llena de exiliados, había mucha nostalgia, mucho dolor, y uno se pregunta realmente si es que treinta años después el dolor, la herida de que Allende que había ganado las elecciones democráticamente lo expulsaran a tiros, que después se suicidara… eso no va a pasar, lo bueno de la globalización de la democracia, que en mis tiempos jóvenes se decía que eso era una cosa que había que combatir porque era una democracia burguesa, eso ahora permite que esos fenómenos acaben, como pasó en Venezuela, que un gobierno gane unas elecciones, y las reformas  que haga un gobierno difícilmente podrán eliminarlas, porque si han sido reformas sociales que han favorecido a la sociedad y a la economía naturalmente las van a mantener, es otra manera de construir un mundo más justo, ¿y la historia qué puede aportar a eso? pues situar a lo largo de la historia eso, si hacemos una comparación entre Allende y lo que puede pasar en Bolivia, decidme vosotros si eso es algo más que pura biografía personal,  eso importa mucho, que se hagan análisis históricos para saber donde estamos y donde podemos estar, eso es parte de la función social de la historia.

 

– Como futuros, si lo somos, si lo estamos, somos profesores de español, podemos hablar de cultura en América Latina, sensibilizar a los alumnos belgas que no conocen si quiera a Bolivia …

 

Has dicho una cosa –todo esto lo colgamos después de la página Web- que para abreviar y dejar tiempo al diálogo con vosotros no lo he dicho, y es una     los hispanistas no están jugando suficientemente este papel de puente que juega España yo diría entre Europa y América Latina en este mundo global, es decir, que el hispanista, sea historiador, sea en lengua y literatura, no está aprovechando la situación privilegiada para unir en comunidades académicas suficientemente los dos lados del Atlántico. Lo digo porque hay hispanistas, -es el caso de Claudio, Claudio es muchas cosas, pero también es hispanista, es un hombre del Renacimiento- pero no de una manera suficientemente decisiva, no se dan cuenta de algo que hemos aprendido en HaD, que puedes investigar sobre América Latina y estás dando tu aportación, pero tu aportación es mayor si además creas unos lazos humanos y un movimiento colectivo donde juntos hacemos cosas comunes en pro de la literatura, en pro de la historia, y eso Internet lo hace posible, antes era imposible porque los viajes a América Latina y América Latina-Europa son caros; yo lo que diría  a los alumnos, en este caso de lengua y literatura, es que aparte de otras razones, América Latina además de ser un centro de la historia mundial en nuestro momento es una experiencia cultural, antropológica e histórica impagable, yo conozco a más colegas europeos que cuando vamos allá volvemos con las pilas cargadas, por eso no entiendo eso de que no tiene nada que aportarnos, ilusión, energía, es una sociedad que está haciendo ahora cambios, las transiciones a la democracia las hicieron en los años 60-70, en los años 80 en algunos casos, y ahora buscan transiciones sociales, ya tienen la democracia y no la valoran, se dan cuenta de que es un instrumento de transformación social y ahora quieren simplemente lo que a Europa le ha costado tanta sangre y tantas revoluciones y guerras incluso, quieren que se reparta la renta más equitativamente, es realmente un escenario histórico impresionante, a mi me recordaba a mis años jóvenes, ellos están llegando más lejos, cuando nos tocó vivir la transición de la dictadura a la democracia en España donde la universidad jugó un papel central, ellos van más allá que nosotros, nosotros hemos hecho una transición en los años 70 como hemos podido y ellos están mejorando, están creando mejores modelos de transición de dictaduras a democracia porque en algunos países se está prolongando esa transición porque la sociedad civil no quedó contenta, en argentina es muy evidente, pero Argentina no es una sociedad civil de la que estamos hablando tan activa, ni México tampoco, entonces un país pequeño como Bolivia consigue eso, y en otros países como Venezuela se creó una sociedad civil desde arriba, con lo cual no es lo mismo naturalmente, también existe un movimiento social que apoya al gobierno actual, yo sé que es un tema que se debate mucho pero que existe, fue creada desde arriba, y en Bolivia fue creada de abajo a arriba, es una sociedad civil que se ha creado a sí misma y que ha llegado hasta el gobierno, yo creo que en ese sentido se ha dado un salto de calidad, también para el movimiento social global altermundista, porque en el fondo es consecuencia de ese movimiento es un nivel nacional.

 

– Sí sé que la situación en esos países, menos importantes aquí, podemos ilustrarla por la narrativa… analizar un texto…

 

Pues eso mano dura al gobierno para cumplir las promesas electorales y crear un nuevo tipo de políticos que sea más honesto y más honrado, eso es muy difícil en América latina, pero hay que tener esperanza de que lo consigan y de hecho en Bolivia ya han expulsado a alguien del gobierno  por ese tema, Evo Morales es un dirigente sindical y tiene que continuar en ese camino, en España se está consiguiendo con el gobierno de Zapatero para Europa un cambio muy importante, alguien que cumple sus promesas, y cuando tú le dices a otro político “no, es que eso lo he prometido en la campaña electoral y quiero cumplirlo”, “bueno, en las campañas electorales se dice cualquier cosa”, no, y eso que en España se está haciendo tiene que haber un gobierno que lo haga en América Latina, quizás sea la oportunidad de Bolivia, porque hasta ahora no hay demasiados precedentes, incluso en gobiernos de izquierda, hay que tener la esperanza de que van a ir por ahí las cosas, y además de que utilizan la democracia como elemento de transformación social, sin sangre, sin terrorismo, sin estas cosas, lo cual forma parte de los valores de nuestro tiempo, antes la vida humana valía menos, ahora parece que vale más, entonces vamos a cuidarla y que nadie muera por un ideal, y que nadie sea asesinado por un ideal. En ese sentido en América Latina  eso penetra con dificultad, la democracia está poco prestigiada, pero si se consigue demostrar que la democracia es un instrumento de transformación social… a ver si lo de Bolivia tiene éxito vamos por buen camino.