Mesa B
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Enrique Florescano Mayet
Consejo Nacional Para la Cultura, M�xico
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>La fragmentaci�n de algunas naciones modernas en Europa ha puesto de
>manifiesto la existencia de comunidades locales muy viejas cuya identidad
>estaba latente, pero que no se hab�a manifestado pol�ticamente debido a los
>intereses de un nacionalismo globalizador que las hab�a mantenido
>soterradas. Se trata de un fen�meno moderno, caracter�stico de muchas
>naciones en casi todo el mundo, que ha venido adquiriendo cada vez m�s
>fuerza y, en algunas ocasiones, ha explotado con violencia. Es el caso, por
>ejemplo, de las comunidades ind�genas de Los Altos de Chiapas en M�xico.
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>Se trata pues de explicar la gestaci�n del fen�meno ideol�gico-pol�tico que
>llamamos "nacionalismo" durante el siglo XIX mexicano. La manipulaci�n del
>pasado, a trav�s de la conformaci�n de una historia nacional un�voca, dio
>como resultado el surgimiento de una "comunidad imaginada". Para llegar a
>esta comunidad, a este Estado-naci�n que llamamos M�xico, hubo necesidad de
>pasar un tormentoso siglo de enfrentamientos entre los grupos tradicionales
>y un grupo que sosten�a los nuevos ideales, cuya base estaba en la igualdad
>de todos los ciudadanos ante la ley, en el respeto a las instituciones que
>conforman al Estado como ente supremo del orden pol�tico, y en la formaci�n
>de una cultura nacional. Este grupo es conocido como la "Generaci�n de la
>Reforma" (Ju�rez, Zarco, Ram�rez, Payno, Lerdo de Tejada, Riva Palacio,
>Altamirano, Vigil y Prieto, entre otros) y su objetivo fue desaparecer la
>sociedad heterog�nea, destruir las etnias y los grupos que pretend�an
>imponer sus intereses, redefinir el concepto y el �mbito de nociones como
>"patria", en pro de un Estado-naci�n integrado por ciuadadanos iguales
>entre s�.
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>Vista as�, la naci�n moderna no surgi� de la "federaci�n" como convenio de
>naciones hist�ricas previamente constituidas, sino de la imposici�n de los
>ideales liberales por parte de un grupo que lleg� al poder en distintos
>momentos, cuando super� a sus tres grandes enemigos: la Iglesia, las
>facciones conservadoras y las intervenciones extranjeras. Esta imposici�n
>de ideales constituy� una naci�n imaginada por encima de las naciones
>reales.Y super� la m�xima de sus pruebas cuando Ju�rez orden� el
>fusilamiento de Maximiliano, Miram�n y Mej�a, porque con este acto elev� a
>la categor�a suprema el principio de la soberan�a nacional.
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>Este "nacionalismo artificial" se impuso mediante un trabajo lento de los
>liberales que mantuvieron como eje el programa educativo. A trav�s de la
>educaci�n oficial, de los museos, de los discursos, de las historias
>nacionales (cuyo ejemplo m�s notable es el "M�xico a trav�s de los
>siglos"), de los peri�dicos y las revistas, trazaron una historia que
>integraba los periodos excluyentes en un discurso coherente, donde cada
>etapa era como un estadio que cumpl�a las leyes inmutables del "progreso" y
>acumulaba todo el pasado conocido.
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>De esta manera se form� una conciencia nacional asentada en una "identidad
>imaginada".
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