Tema 15
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M� Luz Pintos Pe�aranda
Universidad de Santiago de Compostela
Sobre la utilidad de la Filosof�a para la Historia.
Propuesta de distinci�n y de confluencia
Aceptando el reto de la interdisciplinaridad como un problema a resolver, esta Ponencia se centra en las relaciones entre la Historia y la Filosof�a con los siguientes objetivos:
1) Clarificar la distinci�n entre estos dos saberes, en cuanto a su materia de estudio, en cuanto a desde qu� perspectiva abordan cada una de ellas esta materia de estudio, y en cuanto a la tarea y objetivo final que se proponen. Esta clarificaci�n llevar� consigo el desenmascaramiento de varios "desprop�sitos" en los que con mucha frecuencia hemos incurrido tanto los historiadores como los fil�sofos y que han motivado la mutua ignorancia que nos profesamos e, incluso, el desprecio mostrado hacia determinadas parcelas de estos saberes tanto por parte de los unos como de los otros.
2) Conceptualizar la distinci�n de ciertas disciplinas que hay tanto en el seno de la Historia como de la Filosof�a y que, por la similitud de sus denominaciones, se prestan a ser confundidas entre s� y a no saber muy bien si pertenecen a la Historia o a la Filosof�a. Disciplinas tales como la "Teor�a de la Historia", la "Filosof�a de la historia" o la "Filosof�a anal�tica de la Historia".
3) Mostrar que ambos saberes -la Historia y la Filosof�a- parten en su investigaci�n de una misma realidad pero que, a pesar de este punto de partida com�n, como cada uno de ellos enfoca esta realidad desde niveles diferentes esto segundo hace que pase desapercibido lo primero. En definitiva, clarificar todo esto pensamos que es la �nica f�rmula que puede ayudarnos a entender en qu� son complementarias la Historia y la Filosof�a y qu� podr�an aportarse mutuamente en una colaboraci�n interdisciplinaria.
Como paso necesario para esta labor de clarificaci�n, se va a analizar en qu� consiste esa misma realidad de la que parten inicialmente tanto la Historia como la Filosof�a. Esta anal�tica nos conducir� a entender qu� es lo propio de la Filosof�a y en qu� sentido puede contribuir a enriquecer la labor del historiador ya que �ste, en su pr�ctica historiogr�fica, siempre arrastra consigo una serie de preguntas y de pre-supuestos no tematizados que son los que la Filosof�a indaga como su tarea m�s propia. Por ejemplo: qu� es la historia-realidad, qui�n y c�mo es el sujeto de la historia, en qu� consiste su vivir espec�ficamente humano y en qu� su mundo vital espec�fico, qu� es lo que le lleva a ser hist�rico, qu� es lo que le posibilita y, acaso, le impele a insertarse en una corriente de tradici�n hist�rico-cultural, en qu� radica la posibilidad humana de interesarse cognoscitiva o historiogr�ficamente por su historia, si vivir hist�ricamente es o no un modo de vivir en la realidad espec�fico de los sujetos humanos y si es o no com�n a todos ellos, si podemos hablar en alg�n sentido de un mismo vivir en la historia -universalmente entendido-aunque no podamos decir que compartimos una misma Historia, etc.
4) Probar que los "desprop�sitos" con los que se juzga a la Filosof�a de la historia hasta su desprecio no tienen hoy fundamento. Esto requerir� examinar en qu� consiste la triple relaci�n que la Filosof�a mantiene con la historia-realidad; relaci�n �sta de b�squeda, de descripci�n y de propuesta.
En definitiva, el m�ximo objetivo que aqu� nos proponemos es dar razones que inviten a escucharse entre s� a historiadores y fil�sofos y a superar ciertos graves malentendidos que han inducido a la ignorancia y desprecio mutuos.